EL PAPEL DE RRHH COMO AGENTE TRANSFORMADOR
Equipos & Talento 5-1.
El pasado día 1 de diciembre se celebró el último Desayuno con Talento de 2015. Alrededor de la mesa estuvieron directivos de RRHH de Grifols, Boehringer Ingelheim, Granini, Ribé Salat, Banco Sabadell, Isdin y Gaes que debatieron sobre “El rol transformador del director de RRHH” en un evento patrocinado por la Escuela Europea de Coaching y Training Express celebrado en el hotel Meliá Barcelona de la ciudad condal.
La primera en intervenir fue Margarita Pérez Baño, directora de Políticas y Modelos de RRHH de Banco Sabadell. Para ella, la gran transformación que ha experimentado RRHH en los últimos años se ha plasmado en una evolución de políticas y estructuras para pensar y hablar de personas en toda su concepción. “El empleado es el centro de este nuevo modelo que afecta a los programas de desempeño, desarrollo, selección… potenciando la identificación del talento interno. Y la formación es la punta de lanza para lograr esta transformación”, aseguró.
Este papel básico de RRHH para el futuro de las organizaciones fue el que resaltó Eva López-Acevedo, socia fundadora de la Escuela Europea de Coaching, quien opinó que “poner el foco en las personas y su bienestar no implica perder de vista que las empresas tienen como objetivo principal ganar dinero. Y para conseguir esa doble visión la iniciativa y la responsabilidad debe partir de la alta dirección, que debe darse cuenta que cuando se habla de un empleado no solo debe fijarse en su ‘hacer’, sino en su ‘ser’”. “El reto de RRHH es ser agente de cambio y facilitador de la transformación de la organización. En nuestro caso, con un claro enfoque digital”.
Y Margarita Pérez Baño, de Banco Sabadell, insistió en que es muy importante explicar bien las cosas, que la comunicación entre RRHH y los profesionales en plantilla sea sencilla y clara, algo que facilita la asunción de los cambios y reduce el periodo de “duelo” que puede aparecer cuando el cambio no es deseado. Y esa trasparencia y buena comunicación debe partir del propio director de RRHH, que debe hacer un ejercicio de autonocimiento, en palabras de Olga Salomó, de Boehringer Ingelheim.