Cinco Días 6-4
Las declaraciones de ayer del consejero delegado de BBVA, Carlos Torres, en las que afirmaba que “a muchos años vista” el banco podría funcionar con 1.000 oficinas, de las 3.800 actuales sonaron como un nuevo tsunami en el sector. El imparable avance de la banca digital y operar con tipos al 0% auguran nuevos cierres masivos de oficinas. En menos de un lustro el número de sucursales en España estarán por debajo de las existentes en 1980. El banco que preside Ana Botín fue el primero en dar el primer paso del nuevo ajuste. Y cinco días después, las declaraciones del consejero delegado de BBVA volvieron a alertar al sector. Torres Vila advirtió ayer sobre el cambio de hábitos sin precedentes que en poco más de tres años está provocando la tecnología en los clientes, que prefieren relacionarse con el banco “cada vez más” a través del móvil. Según los datos del banco, solo desde 2009 a 2015 la operativa en oficinas ha disminuido un 41% de 2009 a 2015, en favor de otros canales alternativos, como el móvil, la web, o los denominados gestores remotos.
De hecho, en 2015 los clientes realizaron 40 millones de transacciones, mientras que en los canales online se llevaron a cabo 187 millones de operaciones, con un crecimiento estanco del 83%. Con estos datos, y a modo de reflexión Torres aseguró que BBVA podría acabar funcionando con unas 1.000 oficinas en España cuando los clientes usen más la banca digital. “Tenemos 3.800 oficinas en España. ¿Tiene eso sentido?”, se preguntó el número dos de BBVA, experto en banca digital, en una entrevista realizada con motivo de una conferencia celebrada en Copenhague (Dinamarca) sobre tecnología financiera en Europa, durante un encuentro con la agencia Bloomberg. Y su respuesta fue: “No. ¿Podemos reducir eso? Sí”. Explicó que el banco, el segundo mayor de España por red de oficinas, puede reducir su número continuamente en los próximos cinco años y podría trabajar solo con 1.000 de ellas, en un largo plazo indeterminado, dentro de muchos años, matizó, según Bloomberg.
Su respuesta teórica provocó no solo que recursos humanos del banco negara tajantemente a los sindicatos planes para realizar este duro ajuste, sino que Torres también decidió dirigir una explicación a las redes sociales internas del banco. En ellas apuesta por la oficina como medio de contacto con los clientes aunque “como planteamiento teórico de visión de la industria a largo plazo es previsible que el número vaya disminuyendo, su papel vaya evolucionando y sea complementado con otros canales”.
Fuentes de BBVA, consultadas por el diario Expansión, 6-4, han asegurado que el grupo no tiene actualmente en marcha ningún plan de cierres de oficinas. Las fuentes explican que el comentario del número dos del grupo corresponde a una reflexión sobre el futuro del sector.
Los expertos consideran que aún sobran en España más de 5.000 oficinas. Al cierre de 2015, el número de sucursales ascendía a 31.155, es decir, 15.143 agencias menos que en 2008. La Fundación de las Cajas de Ahorros (Funcas) estima que tan solo con las fusiones entre bancos para afrontar la reducción del negocio acentuarán los ajustes sufridos por el sector financiero durante la crisis. Los recortes adicionales ante el nuevo panorama bancario implicarán el cierre de unas 3.000 oficinas y a una reducción de plantilla de otros 14.688 empleados hasta 2019.