TRES HÁBITOS PARA GESTIONAR CONOCIMIENTO
De un artículo de Javier Martínez Aldanondo, Gerente de Gestión del Conocimiento de Catenaria, jmartinez@catenaria.cl y javier.martinez@knoco.com.1.-
REFLEXIONAR
¿Qué hace falta para reflexionar? Por suerte, no se necesitan ni tecnologías caras ni metodologías sofisticadas, tan solo actitud, un poco de tiempo y formularse algunas preguntas clave:
- Qué tenía que haber pasado y qué pasó en realidad
- Qué salió bien, por qué y cómo repetirlo y mantenerlo en el futuro
- Qué no salió bien, por qué, qué tuvimos que cambiar
- Qué haríamos distinto la próxima vez
SISTEMATIZAR
Por más tedioso que resulte, sistematizar es la única manera de que la organización deje rastro de lo que hace para evitar perderlo. Si no quieres repetir errores y derrochar tiempo valioso en rehacer lo que ya hiciste antes, necesitas dedicar tiempo a documentar y ese espacio debe ser innegociable. Cada empresa y cada persona tienen que ser claros y tajantes respecto de qué es necesario salvaguardar, quién debe hacerlo, cuándo hacerlo, cómo hacerlo y dónde guardarlo de forma que sea fácil de encontrar cuando otra persona (o tú mismo) lo necesite.
COMPARTIR
Para aprender, es imprescindible hacerse preguntas y cuando no me puedo responder una pregunta, entonces voy a buscar el conocimiento que tienen otros. La gestión del conocimiento es básicamente un ejercicio de colaboración, compartir con los demás el conocimiento que tienes y aprender de ellos lo que no sabes. Serás más valioso para tu organización por tu capacidad para transferir tu conocimiento y mejorar a los demás que por el stock de conocimiento individual que acumules.