EL DILEMA DE LA BANCA TRADICIONAL: LA ENTIDADES SE DEBATEN ENTRE COMPRAR EMPRESAS EMERGENTES O DESARROLLAR TECNOLOGÍA PROPIA PARA AFRONTAR EL RETO DE LAS ‘FINTECH’
El País. Negocios 13-3.
La irrupción de las fintech ha planteado un reto a la banca tradicional. Ya nadie niega que el cambio ha empezado. El interrogante es cuál será la velocidad de la transformación que experimenten las entidades.
Si Whatsapp hizo añicos el negocio de la mensajería móvil y los buscadores de vuelos y hoteles pusieron contra las cuerdas a las agencias de viajes, las fintech están llamadas a ser un quebradero de cabeza de la banca.
El pasado diciembre, BBVA admitió en un informe que “los grandes bancos son conscientes de las amenazas que estos nuevos competidores pueden suponer para su modelo de negocio”. La entidad señaló que estas startups “crean grietas por las que las entidades pueden perder los beneficios y también su papel como interlocutor central con el cliente en lo relativo a su vida financiera”. Y a ello se añade, además, la amenaza que suponen gigantes tecnológicos como Google o Amazon.
Sin ir muy lejos, el Instituto de Estudios Bursátiles ya constató que una fintech ya está entre las tres primeras aplicaciones más populares de Google Play en España. Se trata de Fintonic, que se sitúa solo por detrás de CaixaBank y BBVA y por delante de Santander e ING.
Ante la llegada de las fintech, según un informe de Accenture, las entidades tradicionales presentan tres comportamientos:
- la colaboración con otras compañías
- la inversión en startups o tecnología
- el deseo de reimaginar el modelo de negocio.
Como las startups van muy rápido en el desarrollo de la tecnología, muchos bancos se han decidido por la cooperación BBVA y Santander han decidido afrontar el reto creando sus divisiones de venture capital. El banco presidido por Francisco González cuenta con un fondo de 250 millones para la compra de fintech. Este mes adquirió la finlandesa Holvi, que se añade a una cartera en la que están Atom, Madiva Soluciones y Simple.
El Santander dotó a su fondo con 100 millones de euros con el mismo propósito. De momento, se ha hecho con firmas como My Check, iZette, Kabbage o Ripple Labs. CaixaBank, en cambio, ha optado por el desarrollo interno de nuevas tecnologías. En enero presentó ImaginBank, su banco móvil.