LA GESTIÓN DE LOS NUEVOS PROFESIONALES: EL “SIETE MÁGICO” DE LOS “MILLENIALS”
Por José Manuel Casado en Harvard Deusto Business Review, julio-agosto 2016.
Generación Silenciosa, “Baby Boomer”, Generación X, Generación Y –“millennials”– y Generación Z forman parte de la clasificación, en cohortes de edad, de los colectivos de trabajadores, realizada por los expertos, con el objetivo de buscar características diferenciales entre unos y otros para, de esta forma, intentar establecer parámetros de gestión que permitan atraer y retener al mejor talento en las organizaciones:
- Trabajo motivador y retador.
- Crecimiento y desarrollo. Los millennials buscan, sobre todo, experiencias gratificantes y de crecimiento. Para este grupo de trabajadores, la formación, el trabajo y el juego deben darse conjuntamente en el lugar de trabajo. El aprendizaje y el sentir que se aporta valor es importante, valorando no solo la colaboración, sino también el intercambio de conocimiento, por lo que aprecian la movilidad funcional e incluso internacional (la empleabilidad es un aspecto importante para su futuro).
- Relaciones con sus supervisores. Demandan ejemplaridad, cercanía, accesibilidad y que se les tenga más en cuenta para la toma de decisiones.
- Ambiente de trabajo. Este es otro de los temas importantes a considerar. Los nuevos profesionales demandan un contexto organizativo de coworking divertido en el que exista colaboración real y en el que el espacio de trabajo sea más parecido al de un café tipo Starbucks que a un puesto de las viejas oficinas. Les atraen ambientes en los que se mezclen empresas grandes, startups y emprendedores autónomos, conformando un contexto organizativo.
- Remuneración y reconocimiento. Es cierto que los millennials prefieren tener experiencias que les den valor a tener propiedades, pero eso no quiere decir que no les importe el salario.
- Conciliación o equilibrio entre vida profesional y privada. Cuando las líneas entre lo que es trabajo y lo que no lo es se difuminan, cuando no para las que el trabajo no significa sacrificar su estilo de vida, y aprecian que sus empleadores tengan políticas favorables para su unidad afectiva.
- Procesos de trabajo. Aquí se engloban aspectos como la autonomía profesional y la claridad de objetivos para conocer su responsabilidad individual dentro de un contexto creativo, donde una comunicación permanente y personal –one to one– esté soportada por las tecnologías más avanzadas de interacción social, a través de plataformas colaborativas y redes sociales dentro y fuera del trabajo (que faciliten que el trabajo puede hacerse en cualquier lugar y a cualquier hora).