FAINÉ Y ESPAÑA, por Luis María Ansón
El Mundo 9-1.
Fainé superó la llamada crisis «bancaria», es decir, la crisis de las Cajas, integrando ocho de ellas y varias entidades bancarias a punto de quebrar en un Banco que está ahora a la cabeza de Europa, potenciado además por una Fundación, cabecera del Grupo «la Caixa», que dedica 520 millones de euros al año a labores sociales, culturales y de investigación en toda España. El Financial Times calificó a «la Caixa» como «el silencioso motor de España». Parece lógico que los partidos constitucionalistas soliciten el consejo de líderes económicos y empresariales como Fainé para encauzar la situación de Cataluña, que bordea de nuevo el despeñadero secesionista. «El poder no existe para mí, solo el servicio», ha dicho Fainé, al que Buck califica en el primer periódico británico financiero como «hijo de campesinos iletrados, que nació en una casa sin agua ni electricidad, trabajando a los 13 años en una tienda de reparación de bicicletas y convertido, a base de inteligencia, equilibrio y tenacidad, en el responsable de una de las entidades financieras más sólidas de Europa». Fainé ha mantenido siempre «un inteligente equilibrio de concordia y conciliación ante los tirones independentistas de un sector de Cataluña».