LO QUE HAGO, ¿TIENE SENTIDO?
Por Santiago Álvarez de Mon. Ex.12-3-21.
Uno de los libros que más recomiendo a mis alumnos, clientes, amigos, es El hombre en busca de sentido, de Víctor Frankl. Catedrático de Psiquiatría por la Universidad de Viena, la logoterapia, su doctrina terapéutica, se desmarca claramente de las escuelas de pensamiento de Freud y de Adler. Si vuelvo a este incierto 2021, ¿existen causas que merecen nuestra movilización y energía? La respuesta es obvia. La superación definitiva del coronavirus, el desarrollo de la ciencia para adelantarse a otras pandemias, la preservación del planeta, el cuidado de nuestra casa común, la igualdad y dignidad de la mujer –sin necesidad de movimientos que huelen a totalitarismo–, la injusticia social, la construcción de Europa, nuestra convivencia en paz, la miseria, el hambre, la paz mundial, la educación de nuestros hijos en libertad, en valores que nos ennoblecen, la familia, el cuidado de los enfermos, de los mayores, un trabajo honrado… la lista es interminable, ilimitada. ¿Dónde están los líderes? ¿Cómo trabajar por ideales tan sublimes si me pierdo en mi ombligo, si no sé lo que da sentido a mi vida?