LOS BANCOS SE JUEGAN 4.000 MILLONES EN LA REVISIÓN DE MIFID QUE PIDE LA CNMV
Ex.1-6-2020.
El regulador español ha reclamado a la Comisión Europea la prohibición total de los incentivos (comisiones de retrocesión) en la venta de productos financieros a clientes minoristas en toda la Unión Europea, dentro de la revisión de Mifid II en la que Europa está trabajando. Esta medida afectaría a los 4.083 millones de euros en comisiones de retrocesión en fondos, planes de pensiones y otros productos, como unit links, que ingresa la banca al año. Es decir, es la cantidad que dejarían de ingresar los bancos españoles cada año si se cumpliese la voluntad de la CNMV. Hasta ahora, el foco de Mifid II recae sobre las comisiones que las entidades cobran a sus clientes por la distribución de fondos de inversión, que se han considerado en muchos casos abusivas. La norma actual solo obliga a las firmas a justificarlas mediante la oferta de un valor añadido, como un servicio de asesoramiento. Y solo con esto, el cobro ha disminuido entre un 10% y un 20% en España en dos años, según el regulador. La institución presidida por Sebastián Albella ha detectado una aplicación no homogénea entre unos países y otros dentro de la UE, que deja a los bancos españoles en clara desventaja. La legislación española es más estricta en este punto que la de otros países vecinos que sí permiten incentivos por servicios distintos a los de asesoramiento, o no especifican cuándo aplicarlos.