UN PACTO NACIONAL POR EL EMPLEO PARA LOS `MILLENNIALS´
ACTUALIDAD LABORAL
POR ANTONIO HUERTAS, Presidente de MAPFRE. Ex. 6-6-2020.
La pandemia no estaba en el guion. Ahora que empezamos a tener cierto control sobre el virus en algunos países, las cifras económicas advierten de intensas caídas en el PIBen las principales economías del mundo y a una fuerte destrucción de empleo. La OIT acaba de publicar que ya han perdido su empleo uno de cada seis jóvenes en el mundo,y que, para el resto, las horas de trabajo se han reducido hasta en una cuarta parte. Tampoco pinta bien la situación para los que ahora ingresan al mercado de trabajo, porque las cicatrices perdurarán en el tiempo. Financial Times habla de una crisis de 10 años.El avance de la sociedad occidental se ha basado siempre en la solidaridad intergeneracional, siendo siempre la generación mayor, nuestros abuelos con nuestros padres o nuestros padres con nosotros, los que se sacrificaron más para que sus hijos accedieran a mejores estudios y oportunidades profesionales. Ahora parece que presentamos como natural el escenario inverso, hacemos víctimas de dos crisis consecutivas a los más jóvenes, en el presente con peores empleos y salarios, y en el futuro condenándoles a pagar los excesos de estos tiempos, con pensiones insuficientes. Creo, por tanto, que se debería impulsar un gran acuerdo nacional por el empleo presente para los menores de 40 años, en el que los agentes sociales, gobierno, empresas y sindicatos nos comprometamos a un plan a cinco años con medidas inmediatas de formación y contratación, impulsando a su vez una reforma de los sistemas de pensiones públicos y privados, de la que ellos sean los primeros beneficiados. Para los formados ya y con experiencia contrastada, planes concretos y específicos de selección y contratación, con apoyos explícitos de las Administraciones Públicas. Las empresas conocemos las carencias que tenemos y podemos reforzar nuestro compromiso sin que ello signifique renunciar a otras generaciones de trabajadores mayores. Y para los más jóvenes, que ahora acceden por primera vez al mercado de trabajo, utilizar de referencia planes como el Action Plan for Youth que puso en marcha la OCDE hace unos años, en el que se hacía especial hincapié en el desempleo juvenil, y en el que la educación y, de nuevo, la formación profesional, ambas vinculadas, resultan claves.