EL DESAFÍO DE UNA CRISIS DESPROPORCIONADA
Editorial de Expansión. 9-4-2020.
La dimensión del desafío que representa el shock pandémico está adquiriendo tintes dramáticos por momentos. A la insoportable pérdida de vidas humanas, que asciende ya a 14.673 en nuestro país y a 87.464 en todo el mundo, se unen irremediablemente las demoledoras consecuencias económicas del mismo. Las últimas estimaciones del impacto sobre la actividad en nuestro país apuntan ya a un desplome del PIB de hasta el 9% en el conjunto del ejercicioy de que la destrucción de puestos de trabajo hasta final de año superará el millón de empleos perdidos de forma estructural, según la patronal CEOE. Un coste desbordante para las costuras de la sociedad española y las capacidades del Estado, cuyo déficit se dispararía hasta el 11% del PIB, al igual que en el peor momento de la Gran Recesión iniciada en 2008, y que debido a las medidas para hacer frente a la emergencia sanitaria y su impacto en el tejido productivo vería dispararse la deuda pública hasta el 115% de la riqueza nacional. Unos niveles insostenibles a medio plazo que hacen aún más acuciante una salida rápida de la recesión en curso. Pero ello, a su vez, estará determinado por las decisiones que la UE y el Gobierno español tomen para superarla. Sin la solidaridad comunitaria, España quedaría desasistida para superar sola esta inédita coyuntura. Pero con políticas erróneas como una mayor intervención en la economía y un aumento desproporcionado de la presión fiscal, se asfixiaría la capacidad de regeneración del tejido productivo.