ECONOMÍA EXIGIRÁ FORMACIÓN ANUAL A LOS COMERCIALES DE HIPOTECAS
Cinco Días 3-5.
Por Juande Portillo.
El Consejo de Ministros remató hace una semana la letra pequeña de la reforma hipotecaria que entrará en vigor en junio con un desarrollo reglamentario vía real decreto ley y orden ministerial de Econºomía, que concretan la información precontractual que debe recibir el cliente, acotan la publicidad que puede emitir la banca y fija la formación exigible a quienes comercializan o asesoran sobre estos préstamos. Aunque las entidades financieras tienen mes y medio para adaptarse a la nueva ley, el Gobierno les ha concedido otro tanto adicional – hasta mediados de julio – para cumplir estos últimos requisitos de formación y transparencia. Los niveles de competencias y conocimientos que introduce la norma serán exigibles a quienes comercializan, asesoran o intermedian en la concesión de préstamos hipotecarios, lo que se aplicará de forma generalizada a la plantilla y la dirección de cada oficina eximiendo al personal de administración, contabilidad, recursos humanos, tecnología o telecomunicaciones. La orden ministerial exige al personal “conocimientos adecuados” de los préstamos inmobiliarios, sus implicaciones fiscales, gastos y servicios accesorios. (La noticia recoge una larga enumeración de los servicios). Lo que requerirá “la superación de módulos de formación con un mínimo de 50 horas”a los comerciales, directivos y diseñadores de los préstamos, o de 65 horas a los asesores. Contar con un grado o máster en Ciencias Jurídicas, o en Economía o Administración o Dirección de Empresas, permitirá convalidar parte de dicha formación. Sin embargo, la experiencia profesionalprevia en el campo hipotecario solo rebajará hasta un 20% del volumen de horas lectivas requeridas y siempre que la trayectoria profesional sea al menos de cinco años. La formación reclamada podrá ser impartidapor el propio prestamista o mediante convenioscon entidades, empresas formadoras o universidades, de forma presencial o a distancia, pero deberá ser certificada por un terceo, bien firmas habilitadas por el Banco de España o por la propia entidad siempre que ésta no haya ofrecido la formación. Además, “el personal deberá recibir anualmente módulos de formación continuada, de contenido tanto teórico como práctico”, entre 10 y 15 horas.Cada entidad, a su vez, deberá evaluar la certificación de su personal, elaborar planes de formación inicial y continuada o llevar a cabo una revisión “al menos anual” e informar al supervisor de la capacitación de su plantilla. Un trabajo ingente pues la banca cuenta con casi 200.000 empleados.