EL DESPIDO INTERIOR, LA OTRA GRAN DIMISIÓN
Por Ana Muñoz Vita. Cicodias.com. 15-1-22.
El teletrabajo es una herramienta para mantener al talento, incluso a menor coste. “Se produce lo que se conoce como el despido interior. No te despide tu jefe, no te despides tú, pero internamente te sientes despedido. No hay ni implicación ni compromiso. Más allá de la bajada de productividad, el problema es que es contagioso”, apunta Sánchez. Una cuestión especialmente grave en el caso de los puestos de dirección, ya que su ánimo influye más en el resto, y en los perfiles creativos, que no funcionan sin motivación. Es lo que se conoce como el burnout o síndrome del trabajador quemado, que ha sido reconocido por la Organización Mundial de la Salud (OMS) como enfermedad laboral. El presidente de Alares, Javier Benavente, lo describe como “un agotamiento emocional, la sensación de haber llegado al límite”. Entre sus principales efectos en el corto y medio plazo destaca “un mayor absentismo, menos productividad, más conflictividad laboral y pérdida del sentido de pertenencia a la empresa”. Es por esto que lo ideal es actuar antes de que el empleado tome la decisión de querer marcharse. “Las empresas tienen que hacer estrategias para fidelizar a los empleados, no pensar solo en retener, porque no tiene sentido retener a una persona que quiere irse”, advierte el director del máster en Recursos humanos de ICADE Business School, Pedro César Martínez.