EL JEFE MODELO
Por Isabel Vilches. Ex. 7-12-22.
Unas 200 publicaciones en LinkedIn sobre el día a día en el trabajo –“Sobre los dirigentes autoritarios, de los que tienen un estilo de comunicación a gritos, de los que invaden la burbuja personal a la hora de amonestar a alguien, de los chafarderos…”– animaron al consultor Ignasi Castells (Barcelona, 1954) a recoger sus reflexiones en “En clave de personas”. Jefes más empáticos, empresas más humanas, con 65 minirrelatos donde analiza cuáles son los comportamientos más comprensivos y tiranos de los gerentes, qué hace a las compañías ser más o menos humanas y cómo son los personajes más odiados de la oficina (los pelotas, los trepas, los listillos… que proliferan especialmente en organizaciones poco meritocráticas merecen un capítulo aparte, literal en estas páginas). Un libro, como remarca, “que no es una apología al buenismo, sino un llamamiento urgente a tratarnos como personas, siempre, y no como números, muy en línea con los tiempos actuales, porque los trabajadores cada vez más exigen ser tratados antes como seres humanos que como profesionales. Demanda que se ha agudizado mucho en los últimos dos años, sobre todo por parte de los jóvenes, que están muy sensibilizados en este sentido y no toleran ciertas prácticas y anteponen su vida personal a la laboral”, apunta el autor. Sí, que el fin del negocio es dar rentabilidad, “pero los objetivos nunca se pueden anteponer a los individuos y muchas veces la presión de las cifras deshumaniza la gestión; hay que apostar por la plantilla”. Con historias reales y anécdotas (personales o relatadas por otros en su experiencia de dos décadas como formador empresarial), Castells ejemplifica comportamientos deseables y tóxicos, principalmente de los directivos.