ISIDRO FAINÉ, EN SU CALIDAD DE PRESIDENTE DE LA ASOCIACIÓN EUROPEA DE CAJAS DE AHORROS Y BANCA MINORISTA, HA PEDIDO QUE LOS REGULADORES NO APLIQUEN “UNA ÚNICA RECETA A TODAS LAS ENTIDADES»
EX.17-3.
Porque “es un planteamiento que no funciona, y que daña el rol vital de los bancos arraigados en sus territorios locales como proveedores de servicios bancarios y de financiación para la economía real”.
En su intervención en la conferencia anual que la asociación celebró ayer en Bruselas, Fainé fue más allá y señaló que “la diferenciación en la regulación debería basarse, entre otros factores, en el tamaño, el modelo de negocio y la estructura de la propiedad. Este modelo estaría más en la línea con el objetivo de la Comisión Europea de hacer una legislación más clara, más simple y menos costosa”.