LA CREATIVIDAD NECESITA JEFES EMOCIONALMENTE INTELIGENTES
Ex.2-10.
Manejar las emociones y ayudar a canalizar las de su equipo crean entornos creativos. Albert Einstein llegó a la conclusión de que no necesitaba saberlo todo y de que le bastaba con conocer el lugar donde encontrar las respuestas a sus preguntas. En la empresa, será su equipo el que tenga la solución a sus problemas, aunque tendrá que motivar a sus miembros para que la alcancen. Pero ¿cómo conseguirlo? “Siendo un jefe emocionalmente inteligente”. Es una de las teorías que plantea Zorana Ivcevic, investigadora del Yale Center for Emotional Intelligence, un centro dependiente de la Universidad de Yale (EEUU), que ha estudiado cómo los líderes pueden ayudar a fomentar la creatividad de sus equipos. “Los jefes emocionalmente inteligentes son buenos para leer las emociones de sus empleados y se dan cuenta de cuando alguien está insatisfecho o molesto; les ayudan a canalizar sus emociones en acciones más productivas inspirando su entusiasmo o ayudándoles a conocer sus frustraciones; y entienden cómo las decisiones que se toman en la organización afectan a lo que sienten los empleados”, asegura Ivcevic, que añade: “Los jefes emocionalmente inteligentes pueden manejar sus propias emociones y ayudar a los empleados a que canalicen las suyas, algo que ayuda a crear un clima laboral positivo. Los trabajadores sienten que tienen más oportunidades para crecer, aprender y avanzar; se sienten más positivos y son más creativos e innovadores en lo que hacen”.