LAS PROVISIONES EN EL RAMO DE VIDA PESAN EN EL RESULTADO DE CASER
Por E. del Pozo. Ex.25-5-21.
La aseguradora ha destinado 65,2 millones de euros a adaptarse a las nuevas tablas de esperanza de vida. Caser ha cargado en 2020 todo el impacto derivado de la aplicación de las nuevas tablas de esperanza de vida y el esfuerzo se ha dejado sentir en su resultado técnico, el del negocio puramente asegurador, que no tiene en cuenta otros ingresos como, por ejemplo, el derivado de las inversiones. La aseguradora, integrada en el grupo suizo Helvetia, dotó el año pasado 65,2 millones de euros para actualizar sus provisiones destinadas a hacer frente a los compromisos por pensiones con sus asegurados. Con este movimiento, Caser ha dotado en un solo año el cien por cien de la nueva obligación y ha descartado distribuirlo entre varios años, una posibilidad incluida en la normativa que a finales del año pasado fijó esta nueva hoja de ruta para el sector asegurador español. El esfuerzo se ha dejado sentir, ya que el ramo de vida ha encajado una pérdida de 50,5 millones de euros en el resultado técnico de Caser, frente a un beneficio de 12,3 millones de euros en el ejercicio precedente. En consecuencia la cuenta de resultados técnica en 2020 alcanza 19,8 millones, un 74% menos que en el ejercicio precedente, según su Informe de situación financiera y solvencia de 2020. El resultado técnico del seguro de no vida tuvo una evolución más positiva. Creció un 7,7%, hasta 70,3 millones de euros. El ramo de asistencia sanitaria, en el que la entidad tiene puesto uno de sus focos, aumentó un 83,6% este indicador, al alcanzar 14,65 millones.