POR QUÉ ME CONSIDERO FEMINISTA Y TÚ TAMBIÉN DEBERÍAS
ACTUALIDAD LABORAL
POR ANA BOTÍN, PRESIDENTA DE GRUPO SANTANDER. Ex.21-8.
He constatado esa necesidad de asertividad personal y de cambio estructural en todas las empresas en las que he trabajado. Hace más de diez años, cuando era presidenta de Banesto, pronuncié un discurso en la Escuela de Deusto, en una sala con gran mayoría de hombres. Ese discurso describe mi filosofía sobre un entorno laboral más igualitario. En aquel discurso ponía énfasis en los beneficios de la diversidad en la empresa. Con datos de distintos estudios explicaba que tener una proporción más alta de mujeres en puestos directivos, además de ser justo, es bueno para el negocio. Además de talento, las mujeres aportan al negocio competencias complementarias a las de los hombres: mejor comunicación interpersonal, cooperación, pensamiento horizontal y capacidad de escuchar de verdad. También mayor empatía y capacidad de priorizar. Ya en 2008 existían estudios que mostraban que, en los grupos de trabajo con una sana mezcla de mujeres y hombres, había mejor comunicación, estaban más abiertos a nuevas ideas y la confianza entre los miembros del grupo era mayor. Y el resultado era más eficiencia, mejor rendimiento. Todos ganamos.